Son brackets metálicos (acero inoxidable de alto grado) que se colocan en las superficies externas de los dientes. Son pequeños, efectivos y cómodos. Para asegurar los arcos se pueden utilizar ligaduras elastoméricas del color elegido por el paciente. Son ideales para niños y adolescentes.
Consiste en un sistema de alineadores invisibles generados por simulación computarizada que mueven gradualmente los dientes, logrando así corregir las malposiciones dentarias sin utilizar ningún tipo de bracket. Al igual que la ortodoncia lingual, este sistema se utiliza en adultos con ciertos problemas ortodónticos.